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Hola buenas tardes
El curso me acompaño en este propósito esencial de otorgar,sentir que somos en unidad y que es esencial amar al prójimo como a nosotros mismos.
A mí mismo me trajo de estar en presencia para dar,saber con el corazón que es lo que quiero otorgar…aprender a ser más humano en relación a la máxima
Les deseo a mis compañeros certeza y sabiduría para comunicar
Gracias por todo
Me inspiró saber que al realizar la corrección de mis deseos egoístas (Tikkun personal), estoy contribuyendo a mejorar al mundo, al ayudar a la conexión global por la paz desde el altruismo y el amor a los demás, debido a que la parte y la totalidad son lo mismo.
Desde el cumplimiento de la máxima de la Torá: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, lo cual implica sentir a los demás en el corazón y preocuparnos por cumplir sus necesidades; podemos acelerar la unión de todas las almas en el camino de retorno al Creador para volver a integrarnos en Adam Harishón, de esta manera, alcanzaremos el propósito de la Creación.
Aprender sobre la Lishmá y la Kadushá , me brindó una guía para seguir en el perfeccionamiento del alma, y ampliar la conexión con la Luz a través de la oración, pues sólo la Divinidad puede darnos la fortaleza para alcanzar la santidad y obrar en Su Nombre, superando las tentaciones y las trampas del ego, ya que no hay nada fuera ni más grande que el Creador, pues todo viene de Él.
A mis compañeros les deseo se mantengan firmes en su corrección del deseo de recibir con la intención de otorgar, que cada día estén más motivados a estudiar los libros sagrados y que puedan rodearse de personas espirituales y maestros, que los retroalimenten en el alcance de la equivalencia de forma. Deseo que puedan sentir y amar a los demás como a ustedes mismos, desde el servicio altruista y la interconexión con su entorno.
A lo largo de todas estas semanas, aquella idea de “No hay nadie más fuera de Él“ cambió radicalmente mi percepción sobre quién es el Creador y qué es lo que Él espera de Sus creados.
Ahoraentiendo que a pesar de lo duro que puedan ser lascircunstancias, detrás de todoestásiempre el amor del Creadorinvitándonos a seguir Su camino y cumplir Su deseoparanosotros: llegar a ser igual que Él.
Creo que al desear tener una relación directa con el Creador es el mejor inicios para permitir que el Creador se “acerque” poco a poco más hacia nosotros y que Él corrija y complete TODO lo que nos está haciendo falta para asemejarnos a Él.
Para todos mis compañeros de curso deseo que puedan alcanzar todas su metas espirituales y llegar alcanzar la equivalencia de forma con el Creador. Nunca olviden que el Creador es Uno sólo y Él es inmutable y su amor hacia nosotros nunca cambia.
Lo que más me impresionó del curso es que, al repasar un par de videos del maestro Tony Kosinec, me percaté que no había entendido aspectos importantísimos; si dos días antes me hubiesen preguntado qué es realmente lo que debemos corregir en este mundo, estaría aún pensando la respuesta. Al escuchar de nuevo uno de los videos me doy cuenta de que, aquí no hay nada que corregir, salvo la percepción que tengo de este mundo. Días antes me ha estado llegando una verdad absoluta que dice que “toda la tierra está llena de Su gloria”, por lo cual, lo único distorsionado aquí está en cómo percibo la realidad, que apenas es de un uno por ciento de la totalidad. Creí que ya lo había entendido … y estoy consciente de que, más sorpresas como continuarán llegando. Gracias al Creador por Su infinita sabiduría y bondad y al Rav Dr. Michael Laitman y su grupo de colaboradores por expandir este conocimiento.
Deseo para mis compañeros que perseveren en mantener la constancia en este estudio, el cual abre la puerta a un deseo mayor por conseguir ser semejantes al Creador. Debemos estar conscientes que cada día la exigencia será más elevada y entre mejor nos preparemos, estaremos más capacitados para lidiar con los futuros amigos que tendremos, anteponiendo el deseo de otorgar al egoísmo que nos ha caracterizado. La máxima: Sed santos porque Yo soy Santo, es imposible si lo vemos desde nuestra percepción egoísta; por tanto, debemos confiar en El, sabiendo que, con una buena intención y trabajo continuo, alcanzaremos ese estado de fe por encima de la razón.
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